En el fútbol como en la vida nos encontramos momentos de una catarsi emocional producto de estados extremos. Para evitar esos bloqueos en tú interior es necesario vivir en «equilibrio». Transportarnos en un estado de fluidez interna que nos lleve a afrontar momentos dispares de una forma calmada.
La victoria en Eibar nos dejó un sabor de alegría sin lugar a duda. Hasta hace muy poco hemos tenido la sensación que se tocaba fondo. Sin embargo, esa calma necesaria en momentos complejos te permite ver la realidad de una forma más serena y eficiente para estar preparado y con ello revertir la situación.
Ahora, llega el Real Madrid, un partido bonito para nuestra afición. Pero nosotros lejos de otra idea que no sea ir a por el partido, debemos mantener ese equilibrio y salir a por ellos desde la convicción que el equipo ha mejorado y que nuestro mejor partido esta temporada está por llegar.
Fotos: Dani Madrigal